El Club Tijuana de Sebastián Abreu llega a este duelo impulsado por una sólida victoria 3-1 ante FC Juárez, aunque su rendimiento reciente ha sido irregular, con dos triunfos, un empate y dos derrotas en sus últimos cinco partidos, una tendencia que refleja tanto su capacidad ofensiva como las dificultades que aún enfrenta para mantener estabilidad. El equipo ha demostrado ser peligroso en ataque, sosteniendo un promedio de goles respetable y mostrando variantes que le permiten generar ocasiones con frecuencia; sin embargo, sus vulnerabilidades defensivas siguen siendo un punto crítico y podrían jugar un papel determinante frente a un rival exigente como Tigres. Con estos contrastes, Tijuana buscará equilibrar su juego y capitalizar su buen momento ofensivo para competir con mayores garantías.
Los Tigres UANL llegan a este encuentro en un momento de forma sobresaliente, impulsados por su reciente victoria 3-1 ante Atlético San Luis y consolidándose como uno de los equipos más consistentes del torneo bajo la dirección de Guido Pizarro, con una racha de cuatro triunfos y un empate en sus últimos cinco partidos que refleja un equilibrio notable entre solidez defensiva y eficacia ofensiva. El conjunto felino ha encontrado un funcionamiento muy sólido gracias a un enfoque táctico que prioriza la posesión, la circulación inteligente de la pelota y un ataque bien estructurado, elementos que les han permitido dominar a la mayoría de sus rivales y exhibir un promedio goleador superior al de gran parte de la liga. Este modelo de juego, sumado a su fortaleza reciente en los duelos directos contra Tijuana, podría resultar decisivo para inclinar el encuentro a su favor y prolongar su excelente momento competitivo.
