Guadalajara llega a este compromiso en un momento altamente favorable, después de encadenar cuatro victorias en sus últimos cinco partidos en todas las competiciones, una racha que refleja el crecimiento y la solidez que el equipo ha consolidado bajo el mando de Gabriel Milito. Su más reciente triunfo, un contundente 4-2 sobre el CF Monterrey en casa, evidenció no solo su poder ofensivo, sino también su capacidad para controlar el ritmo del juego y responder con jerarquía en los momentos clave. Con un funcionamiento cada vez más equilibrado y el respaldo de su afición, Guadalajara se presenta como un rival difícil de superar, especialmente en su estadio, donde se ha vuelto un equipo especialmente fuerte y confiado.
El Cruz Azul de Nicolás Larcamón llega a este duelo con un rendimiento irregular, tras sumar tres victorias, un empate y una derrota en sus últimos cinco partidos, aunque su tropiezo más reciente —un 2-3 en casa frente a Pumas UNAM— dejó en evidencia ciertas fragilidades que el Deportivo Guadalajara podría intentar aprovechar. Aun así, la Máquina cuenta con un argumento importante a su favor: su dominio reciente en los enfrentamientos directos, donde ha logrado imponerse en cuatro de los últimos cinco duelos ante Chivas, un historial que debería reforzar la confianza del plantel para encarar este compromiso. Con este contraste entre una forma colectiva algo inconsistente y una superioridad reciente frente a su rival, Cruz Azul buscará corregir errores, recuperar orden y apoyarse en su favorable antecedente para competir con firmeza en un partido que promete ser intenso.
